¿Sabías que nuestra geografía guarda memorias de todo y de todos los que por aquí pasaron? Observen la toponimia del lugar, pues nos habla a veces más que el propio enclave. Sepan que podemos encontrar paisajes de montañas levantados por gigantes o presencias fabulosas en piedra y tierra que nos recuerdan antiguas historias de amores y de lágrimas. España está plagada de lugares y enclaves mágicos, bosques milenarios y encantados en el que se ocultan seres féericos, ríos y lagunas bañadas por ninfas y bestias, entradas a mundos de las hadas, montañas de poder telúrico, montes sagrados y santuarios rituales, colinas de mujeres y doncellas esculpidas, picos y cimas que antaño fueron gigantes, cordilleras y serranías que esconden palacios encantados y tesoros en grutas de dragones, cuevas que acumulan saberes y secretos como la de Hércules, ciudades insólitas y secretas, caminos de peregrinaje y de búsqueda del Grial, castillos templarios y peñas diabólicas, o rutas de chamineras y espantabruxas…