Tesoros y objetos de poder

¿Sabías que en España hay miles de tesoros, muchos de ellos ocultos y encantados, que permanecen escondidos en cuevas, rocas y montañas? Encontraremos desde tesoros enterrados por los moros tras su huida por la Reconquista a los que fueron hechizados por hadas y mouras. Algunos de ellos no son visibles a simple vista, serán otorgados cuando el buscador supere determinadas pruebas, serán los tesoros a los que accede el iniciado en el camino del héroe. Todos ellos son mágicos y obran todo tipo de prodigios, pueden tener poderes curativos o efecto apotropaico, que alejan el mal y propician el bien, como muchas reliquias, amuletos naturales de propiedades energéticas y talismanes —confeccionados según la astrología y por medio de rituales con oraciones— para espantar a todo tipo de demonios.

Estos son algunos tesoros y objetos de poder:

• Árbol de Guernica: árbol sagrado de cultos ancestrales paganos.
• Bronce de Carriazo (Huelva): Una representación de la diosa Astarté acompañada por dos torsos de aves de la desconocida Civilización Tartésica que nos refiere al culto a esta diosa en la Península Ibérica y su sincretismo por el Mediterráneo.
• Cabeza de San Guillén: Reliquia de poderes curativos. La cabeza cortada de cultos paganos que recuerda a las ancestrales calaveras en las que se bebía vino.
• Cadenas de Teodosio Goñi (Navarra): Elemento curativo para aliviar el dolor de cabeza.
• Caldero de oro en Riaño (Asturias): Tan rico y poderoso como cargado de mal augurios y desgracias
• Corona de Recesvinto:  Corona votiva del rey Recesvinto del Tesoro de Guarrazar, el tesoro visigodo más importante de España vinculado a la realeza y santuarios perteneciente posiblemente a una basílica que estaba bajo la advocación a Santa María.
• Cruz de Caravaca (Murcia):
• Cruz de la Victoria (Asturias): Reliquia donada por Alfonso III en el año 908 a la Iglesia de San Salvador de Oviedo. San Antonio Anacoreta le ofreció, según la leyenda, a Don Pelayo una tosca cruz de roble y le dijo: «He aquí esforzado campeón, la señal de la victoria».
• Cueva de los Moros en Alborea (Albacete): Tesoro escondido de los moros antes de su partida.
• Cueva del Moro en Ayna (Albacete): Tesoro escondido de los moros antes de su partida.
• Cueva del Rey Moro en Alpera (Albacete): Tesoro escondido de los moros antes de su partida.
• Cueva de la Roca de l’Àguila (Castellón): Tesoro escondido de los moros en Xodo antes de su partida, donde encantaron a un principe bajo la forma de un temible toro para que lo custodiara, a su vuelta desharían el sortilegio y recuperarían su tesoro. Nunca volvieron y allí sigue el tesoro. Para recuperarlo se ha de entrar en la cueva antes de las doce la noche de San Juan llevando contigo aguja de coser sacos bien afilada para clavárselo en el lomo del toro cuando te arremeta, además de cargar con él sin mirar atrás hasta salir de la cueva.
• Cueva de los Moros en Abengibre (Albacete): Tesoro escondido de los moros antes de su partida.
• Estela de Barros (Cantabria): Insignia de los estandartes que portaban los guerreros cántabros.
• Estela del Casar (Extremadura): Figura antropomorfa de un ser de cabeza ovalada de más 2.000 años de antigüedad, pieza enigmática que encierra mensajes imposibles de descifrar. La figura parece un guerrero que vigila las almas que duermen o bien una pieza relacionada con alguna divinidad pagana.
• Fuente de la Mora en Vianos (Albacete): tesoro escondido de los moros antes de su partida.
• Ídolo de Tara (Gran Canarias): Figura de forma femenina cultura guanche relacionada posiblemente con ritos y cultos a la fertilidad.
• Indalo (Almería): Representa un figura humana con brazos extendidos sobre los que sostiene un especie de arco iris o bóveda celeste, cuyo significado podría estar vinculado a un dios poderoso y protector o quizá un mensajero de los dioses. 
• Libro de San Cipriano: Grimorio muy utilizado en España para poder localizar tesoros encantados y de difícil acceso.
• Lignum Crucis de Santo Toribio de Liébana: El pedazo de madera la cruz de Jesucristo más grande que se conserva.
• Mesa de Salomón:  Una mesa en donde el rey Salomón escribió todo el conocimiento del Universo, la fórmula de la creación y el nombre verdadero de Dios: el Shem ha-meforash, que no puede escribirse jamás y solo debe pronunciarse para provocar el acto de crear. Con ella se puede ver el pasado, el presente y el futuro. La tabla dará a su propietario el conocimiento absoluto, pero el día que sea encontrada el fin del mundo estará próximo.
  Se dice que en el interior del palacio encantado de Toledo que perpetró Don Rodrigo los árabes se hicieron con la mesa como botín y se la llevaron a Jaén. También se dice que los templarios que la custodiaban en la Cueva de Hércules tras ser condenados por Felipe IV la pusieron a salvo la trasladaron hacia Jaén.
• Mantel de Coria (Extremadura): Un trozo de la tela del mantel que los apóstoles tendieron sobre la mesa de la última cena con Jesús.
• Mesa de Salomón: llevaba inscrito en ella el Shem Shemaforash, el nombre secreto de Dios, y quien pudiese leerlo conseguiría una sabiduría ilimitada.
• Palacio de Mogente (Valencia): Este palacio es un tesoro escondido dentro de las montañas visible escaso tiempo por un sortilegio de un pergamino de un mago en que se abría la rocas que lo ocultaban hasta que Fátima de los jardines de tanto insitir en verlo quedó prisionera del encanto y no pudo salir jamás de la Escala de la Doncella. 
• Pantocrátor de san Clemente de Tahull (Lérida): Pintura de gran carga simbólica y oculta.
• Pedrón de Padrón (La Coruña): ara romana dedicada al dios Neptuno, dios de las aguas, donde fue amarrada la barca que trasladó los restos del apóstol Santiago desde Palestina (según la tradición jacobea).
• Pendón de San Isidoro: Pendón estrado de la toma de Baza cuando San Isidoro apareció de los cielos a lomos de un corcel.
• Pentalfa de San Bartólomé de Ucero (Soria): Rosetón mágico o estrella pitagórica formada por cinco puntas en donde surge un pentágono que indica un enclave de poder.
• Pañolón de Oviedo: Sudario que cubrió la cara de Cristo en el traslado de la cruz al sepulcro.
• Petroglifos de Mogor (Pontevedra):  Grabados de origen neolítico tallados en roca de estructura laberíntica, quizá de carácter mágico y oculto o relacionado con los equinoccios y solsticios, donde destacan su fluidez, con un empiece y final en un recorrido único.
• Pilar de Zaragoza: Columna en la que se apareció la Virgen a Santiago Apóstol en su peregrinar por España.
• Reliquias de Santa Teresa: Se dice que muchas de ellas han obrado milagros. Se encuentran por media España.
• Rincón del Moro en Hellín (Albacete): Tesoro escondido de los moros antes de su partida.
• Sangre de San Pantaleón (Madrid): Reliquia que contiene unas gotas de sangre de San Pantaleón y que según la tradición cada 27 de julio la sangre pasa a estado líquido para después coagularse. De no suceder el prodigio será un presagio de grandes desgracias.
• Santo Grial (Valencia): el cáliz o copa que contuvo la sangre de Cristo recogida por José de Arimatea.
• Sepulcro del Apóstol Santiago (Santiago):
• Taulas de Menorca: Construcción de la cultura talayótica, tasados alrededor del 600 aC, ubicados en santuarios donde se realizaban sacrificios de animales, se depositaban ídolos y figuras mágicas.
• Teso de las Pozas: Tesoros y palacios encantados por los moros con accesos de entradas mágicas.
• Tesoro de Boadil en la Alhambrala
• Tesoro de Sa Torre Llafuda:
• Tesoro del castro de Altamira: Al que accedió un cirujano y quedó calvo al violar donde se hallaba la entrada secreta.
• Tesoros moros: tesoros ocultos por los moros durante la Reconquista al huir al ser derrotados como los tesoros de la sierra de Magina: el Tesoro de Cabra, Gallarín, el tesoro del Rey Almanzor, el tesoro del Collaíllo, el oro de Gualijar o el Tesoro de Bélmez donde en muchos casos dejarán guardianes mágicos que velarán por la seguridad de las riquezas.
• Tesoros en sueños: Ensueños. La existencia de tesoros por revelación sobrenatural. Así por ejemplo en El Ballesteros (Albacete) soñaron que había un tesoro bajo la piedra en la que duerme una cabra, o en Liétor soñaron que se encontraba bajo la propia casa de un campesino. También en Salobre hay leyendas de un campesino que soñó que había un tesoro en un cerro, pero que su candidez hizo que se lo robaran.
• Torico (Teruel): Fuente coronada por un toro que alude a la fundación de Teruel allá por el sXII cuando durante la Reconquista Alfonso II buscaba un lugar para asentarse, y para ello soltaron un toro que se detuvo debajo de una estrella, exactamente en Teruel (Toruel).
• Toros de Guisando: Elementos sagrados de la cultura vetona, el toro como animal de poder vinculados a recintos ceremoniales, a la fertilidad y a la fuerza viril.
• Tesoro de Puig de Reig (Mallorca): Tesoso guardado por los moros en su huida por la conquista cristiana y hechizado por un brujo.
• Toros de oro (Hellín): Tesoro escondido de los moros antes de su partida. El rey moro odenó fundir todo el oro que tenían para crear un gigantesco toro de oro macizo que enterraron y escondieron, y que aun siendo encontrado, nadie pudiera sacarlo de allí y disfrutar de su riqueza.
• Verracos extremeños (Extremadura): Se cree que pueden ser divinidades funerarias o propiciadoras de pastos y protectoras del ganado, o símbolos de fecundidad o quizá como como marcadores de terrenos y lindes de los clanes.